Pamplona...en verano

Esta semana me ocupo de las fiestas nocturnas en Pamplona... ¡Pero en verano! Si, para aquellos que no lo tenían tan claro, esta pequeña pero gran ciudad sigue existiendo y teniendo vida juvenil cuando los miles de estudiantes que vienen aquí durante el invierno regresan a sus casas; si bien es cierto que el panorama se vuelve más... navarro.
Empezando por los inicios de Julio, es imprescindible nombrar la fiesta de San Fermín, conocida a nivel mundial gracias a Ernest Hemingway, que visitó nuestra ciudad en la década de los sesenta y decidió hablar de tal festividad en sus libros. El 6 de Julio Pamplona se viste de blanco para asistir al cohete iniciador de las fiestas ( más conocido como ''chupinazo'' ), que no cesarán hasta el día 14 con el "pobre de mí". Durante estos nueve días el ombligo de Navarra recibe a miles de turistas que vienen a vivir en primera persona la originalidad de las fiestas, y la gran mayoria de ellos se deja ver algún año después. Característica por sus prestigiosas corridas de toros, por sus encierros y por la procesión al Santo el día 7, esta festividad no deja un sólo hueco de la urbe en silencio. ¿Bares para acudir en estas fechas a tomar algo?¿Qué decir si Pamplona al completo se convierte en un bar tanto de día como de noche?Establecimientos y peñas,como la Oberena o la San Fermín se esmeran en transmitir la ilusión de todos los pamploneses por que lleguen las fiestas (imprescindible nombrar la cuenta atrás del establecimiento de Kukuxumusu). Tanto ellas como el ayuntamiento contratan a todo tipo de agrupaciones para amenizar el ambiente de las calles, como pueden ser las txarangras, como la Aburrecalles, La Forris'tar o la Malatxo.
Pero no todo en nuestro entorno son los San Fermines, no.Aparte de los locales de nuestra ciudad, que explicará María, es muy habitual contagiarse del jolgorio de las fiestas de los pueblos de Navarra. No puedo seguir explicando este asunto sin recalcar el hecho de que sin la red de autobuses que comunica a Pamplona con el resto de comarcas nada de esto sería posible. Tanto es así que muchos pueblos en fiestas,como Tafalla (donde numerosos recortadores de astados han visto crecer su éxito), Estella, Olite o Artajona, se llenan de gente especialmente durante los fines de semana.
En definitiva, la Comunidad Foral de Navarra se tiñe de blanco desde principios de julio hasta septiembre, sin olvidar nunca el pañuelico.
Como bien dice este blog, la cosa es moverse...